Todos sabemos que el exceso es malo. Pero a veces uno lo olvida al disfrutar de esos deliciosos dulces que a todo mundo le encanta. Así que, por eso en este artículo te dejo cuatro increíbles consecuencias que deberías de tomar en cuenta la próxima vez que no quieras parar de comer esta rica pero algunas veces, dañina maravilla.
1. Puede provocar malnutrición.
Pueden sufrir deficiencias de elementos esenciales para el buen funcionamiento del organismo como el calcio, hierro, vitamina A y C y el ácido fólico, las personas que extraen el 18% de sus calorías del consumo de azúcar.
2. Caries.
Esto es mundialmente sabido, pero hay que tenerlo en cuenta puesto que puede causar que te salga un pequeño agujero negro cuando se llega a la dentina y puede provocar sensibilidad o incluso dolor. Pero esa es solo una etapa, ya que si sigue avanzando la carie, puede llegar al nervio causando una infección y de seguir así puede llegar al extremo de la pérdida del diente.
3. Te hace más propenso a sufrir fracturas óseas.
Aunque no lo creas, comer caramelos excesivamente puede afectar tu salud ósea. Según estudios publicados en la revista Nutrition Reviews, descubrieron que el hacer esta actividad con frecuencia, reduce la resistencia ósea, lo que te puede llevar a padecer fracturas óseas.
4. Altera la capacidad de aprendizaje.
El alto índice de fructuosa podría interferir en el potencial de la insulina para regular las células que emplean y acumulan el azúcar, lo que es preciso para procesar los pensamientos y las emociones.
Con esto, ahora sabemos que una dieta rica en azúcares no solo afecta al cuerpo sino también al buen funcionamiento del cerebro. Así que por más deliciosos que sea este tipo de alimentos, hay que abstenernos de consumir más de lo debido y pensar en nuestra salud.