El soterramiento de la A-5 es un ambicioso proyecto urbano que pretende cambiar por completo el paisaje del suroeste madrileño. Esta intervención busca enterrar un tramo de la autovía A-5, también conocida como Carretera de Extremadura, en su paso por los distritos urbanos de Madrid. El objetivo es claro: mejorar la calidad de vida de los ciudadanos reduciendo el tráfico en superficie, la contaminación y el ruido, mientras se recupera espacio para las personas.
Este plan ha generado tanto expectación como controversia. A continuación, repasamos todo lo que necesitas saber sobre el soterramiento de la A-5: su finalidad, beneficios, implicaciones técnicas y estado actual.
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Toggle¿Qué es el soterramiento de la A-5?
El soterramiento de la A-5 consiste en enterrar un tramo urbano de esta vía de gran capacidad a su paso por el distrito de Latina, concretamente entre la avenida de los Poblados y la avenida de Portugal. Este tramo registra diariamente un tráfico superior a los 120.000 vehículos, lo que lo convierte en una fuente importante de contaminación y división física entre barrios.
La actuación contempla transformar la actual autovía en un túnel subterráneo para vehículos, y en la superficie construir un bulevar con zonas verdes, carriles bici, espacios peatonales y nuevos equipamientos urbanos.
¿Por qué se plantea el soterramiento de la A-5?
La propuesta responde a una demanda histórica de los vecinos, quienes durante años han reclamado soluciones ante los problemas generados por la autovía:
Contaminación acústica por el paso constante de vehículos.
Altos niveles de contaminación atmosférica en barrios residenciales.
Fragmentación urbana entre zonas como Aluche, Campamento o Batán.
Falta de espacios públicos para el ocio, el deporte o el descanso.
El soterramiento permitiría integrar el entorno urbano, ganando calidad ambiental y seguridad para todos los usuarios.
Características técnicas del proyecto
El soterramiento de la A-5 abarcaría aproximadamente 3,8 kilómetros de longitud. Las características principales del plan incluyen:
Túnel con doble calzada subterránea para ambos sentidos de circulación.
Accesos regulados a la vía soterrada mediante rampas o enlaces.
Sistema de ventilación forzada y medidas de seguridad en túneles.
Nuevo espacio en superficie con árboles, aceras anchas y equipamientos.
Este modelo busca replicar el éxito de otras actuaciones similares, como la M-30 y su integración con Madrid Río.
Beneficios del soterramiento de la A-5
Implementar el soterramiento de la A-5 traería múltiples ventajas para la ciudadanía:
Menos ruido: la eliminación del tráfico en superficie reduce drásticamente el ruido diario.
Mejor calidad del aire: al reducir la exposición directa al tráfico rodado.
Revalorización de los barrios colindantes.
Recuperación del espacio urbano para uso vecinal.
Impulso a la movilidad sostenible (bicicleta y peatones).
Además, se espera una transformación social y económica positiva en los barrios afectados.
Críticas al soterramiento de la A-5
Pese a sus beneficios, el proyecto no está exento de polémica. Algunos puntos de crítica son:
Elevado coste económico, que podría superar los 400 millones de euros.
Obras prolongadas que afectarían a la circulación y la vida vecinal.
Falta de consenso político, con alternancia de apoyos y rechazos.
Riesgo de no reducir el tráfico si no se acompaña de políticas de movilidad.
También se debate si la solución más adecuada sería la reducción directa del tráfico en lugar de soterrarlo.
Estado actual del proyecto
A día de hoy, el soterramiento de la A-5 sigue en fase de planificación. El Ayuntamiento de Madrid ha mostrado su apoyo en varias ocasiones, pero aún se están elaborando:
Informes técnicos y medioambientales.
Estudios de viabilidad económica.
Proyectos de ingeniería previos a la licitación.
Espacios de participación ciudadana, aunque todavía limitados.
Su ejecución dependerá del presupuesto disponible y de la voluntad política de continuar el proceso tras posibles cambios de gobierno.
Comparación con otros soterramientos urbanos
En ciudades como Madrid, Barcelona o Valencia, los soterramientos de vías urbanas han demostrado su impacto positivo:
Madrid Río (M-30): recuperó 10 km de río y zonas verdes.
Glòries en Barcelona: liberó espacio para usos sociales y culturales.
Valencia y el soterramiento de vías ferroviarias: redujo barreras urbanas.
Estas experiencias dan esperanza a los vecinos del suroeste madrileño.
¿Qué futuro tiene el soterramiento de la A-5?
El futuro del soterramiento de la A-5 dependerá de factores como:
El consenso político entre administraciones.
El apoyo vecinal y ciudadano.
La financiación (posiblemente público-privada).
El impacto de las futuras políticas de movilidad sostenible.
La ciudadanía sigue esperando que el proyecto no quede en una simple promesa electoral, sino que se convierta en una realidad transformadora.
Conclusión
El soterramiento de la A-5 representa una oportunidad histórica para mejorar la calidad de vida de miles de vecinos de Madrid. Si se lleva a cabo correctamente, permitirá unir barrios, reducir la contaminación y convertir una autovía hostil en un bulevar amable, verde y habitable.
Es un proyecto de gran envergadura, pero también un ejemplo de cómo la planificación urbana puede marcar la diferencia en el día a día de los ciudadanos. El debate está abierto, pero el objetivo está claro: transformar Madrid hacia un modelo más sostenible, conectado y humano.