Hoy en día, las cosas son cada vez más ecológicas. Parece que el mundo se está dando cuenta de que todos deben aportar aunque sea un poquito para conservar la naturaleza y los recursos no renovables que esta nos ofrece.
Uno de estos elementos sostenibles que la ciencia ha desarrollado son los ladrillos ecológicos, estos ayudan a reducir el impacto climático y sus consecuencias y constituyen una alternativa para proteger la naturaleza pero sin perder calidad.
Ladrillos ecológicos: Nueva alternativa
Una innovadora alternativa para construir viviendas y edificaciones son los ladrillos ecológicos o ecoladrillos. Estos son bloques fabricados con materiales que no generan un impacto ambiental tan grande pero que aun así, poseen propiedades similares a los bloques tradicionales usados en la construcción por lo que la calidad final de la edificación no debería verse afectada.
Los ladrillos ecológicos pueden estar hechos de materiales muy diversos y de acuerdo a éste, las aplicaciones pueden variar. Sin embargo, lo que tienen todos en común es que son respetuosos con el medio ambiente y son sostenibles.
Últimamente, uno de los materiales más usados para fabricar los ladrillos son las botellas plásticas, aunque cada empresa crea modelos diferentes y más elaborados con materiales algo distintos.
Esta podría ser una clasificación de ladrillos sostenibles según el material con el que son construidos:
-Cenizas de carbón: Al hacer ladrillos con este material se aprovechan millones de toneladas de residuos generados en las centrales térmicas de carbón.
-Cáñamo y paja: Aunque parezca frágil, la dureza es similar a la de los ladrillos convencionales. Aíslan muy bien la temperatura exterior, ahorrando gran cantidad de energía.
-Plástico y conchas de maní: Ladrillos duros, aislantes y económicos. Permiten ahorrar energía y estimula a la práctica del reciclaje.
–Tierra o arena comprimida: Aunque resultan más caros y frágiles que los bloques de hormigón, proporcionan un aislamiento muy superior.