Los dulces de los 80 y 90 que ya no existen forman parte del imaginario colectivo de millones de personas. Quienes crecimos en esas décadas recordamos con cariño las chuches que comprábamos en la tienda de la esquina, el kiosco del colegio o en las salidas del cine. Sabores intensos, envoltorios chillones y nombres inolvidables que hoy, tristemente, han desaparecido.
Este artículo es un homenaje a todos esos productos que nos alegraban el día por unas pocas pesetas. Vamos a hacer un repaso por los dulces de los 80 y 90 que ya no existen, pero que siguen vivos en nuestros recuerdos.
¿Por qué ya no existen muchos dulces de los 80 y 90?
La respuesta es simple pero triste: el mercado cambia, las normativas sanitarias también, y los gustos del consumidor evolucionan. Algunos productos se dejaron de fabricar por baja demanda, otros por ingredientes que hoy no están permitidos, y muchos simplemente fueron sustituidos por modas nuevas.
Sin embargo, el cariño que les tenemos permanece intacto. Hay incluso foros y grupos en redes sociales dedicados exclusivamente a recordar chuches, caramelos y galletas desaparecidas.
Chicles que marcaron época (y ya no están)
Chicles Cheiw
Los chicles Cheiw eran duros al principio, pero su sabor frutal y pegajoso conquistó a todos. Venían en pequeños envoltorios de colores y eran baratos. Hoy en día, se les recuerda con auténtica devoción.
Bang Bang
Un chicle explosivo con un nombre tan ruidoso como su sabor. El Bang Bang era una mezcla de chicle y petazetas, que hacía “boom” en la boca. Perfecto para impresionar a tus amigos del cole.
Dunkin Gum
Uno de los chicles más curiosos de la época. El Dunkin Gum venía con cromos y tenía sabores intensos. Aunque el nombre era algo confuso, era un imprescindible de cualquier recreo.
Caramelos que ya no veremos en las tiendas
Caramelos Drácula
Con un sabor potente y una lengua negra como resultado. Los Drácula eran terroríficamente buenos. Formaban parte de los dulces de Halloween antes de que Halloween estuviera de moda.
Kojak relleno de chicle
Los clásicos Kojak siguen existiendo en otras versiones, pero algunos sabores y modelos concretos de los 80 y 90 ya no se fabrican. Ese momento en el que terminabas el caramelo y empezabas a masticar el chicle era mítico.
Caramelos Peta Zetas originales
Aunque los Peta Zetas aún existen, ya no son como los de antes. En los 80 eran un fenómeno. El crujido en la boca, la explosión de sabor… no se ha vuelto a replicar igual.
Galletas, chocolates y barritas que ya no volverán
Pantera Rosa original
Aunque sigue existiendo, su sabor y textura han cambiado. La Pantera Rosa de antes tenía una crema interna más sabrosa y una cobertura más espesa. Las actuales son más industriales.
TBO (de chocolate blanco y negro)
Una delicia de chocolate con galleta que desapareció sin hacer mucho ruido. El TBO era sencillo, barato y delicioso.
Barrita Tronky
Durante los 90, Tronky fue la competencia directa de Kinder. Era una barrita suave, con interior cremoso y recubierta de chocolate. Hoy en día cuesta encontrarla, y su fórmula ha cambiado.
Bony y Tigretón originales
Como la Pantera Rosa, Bony y Tigretón han perdido su magia. En los 80 y 90 tenían más relleno, un bizcocho más jugoso y sabores que nos sabían a gloria. Hoy son solo una sombra de lo que fueron.
Golosinas que desaparecieron sin dejar rastro
Pipas de chicle
Sí, hubo un tiempo en que podías masticar pipas… ¡de chicle! Un producto tan raro como delicioso. Formaban parte de los dulces de los 80 y 90 que ya no existen y que más confusión generaban.
Caramelos con silbato
Eran caramelos que venían con una especie de tubo de plástico que funcionaba como silbato. Era divertido… hasta que se rompía el silbato o te lo quitaban en clase.
Cigarros de chocolate
Hoy impensables por temas de salud y educación, pero en su momento eran lo más. Los cigarros de chocolate te hacían sentir mayor y sabían de maravilla.
Chupa Chups rellenos sorpresa
Existieron versiones con polvo ácido, otras con goma de mascar, y algunas con sabores tan raros que ni sabías si te gustaban. El factor sorpresa era parte de su encanto.
¿Volverán los dulces de los 80 y 90?
Algunos intentos de resurrección ya se han hecho. Marcas como Fini, Chupa Chups o Lacasitos han sacado versiones retro o ediciones limitadas. Sin embargo, muchos de los dulces de los 80 y 90 que ya no existen se han perdido para siempre.
Lo que sí podemos hacer es recordarlos con cariño, hablar de ellos en redes, compartir imágenes antiguas y, por qué no, pedir su regreso. ¡Quién sabe si algún día volverán!
Conclusión: un sabor que permanece en la memoria
Aunque ya no puedas encontrarlos en las tiendas, los dulces de los 80 y 90 que ya no existen siguen vivos en nuestros corazones. Cada caramelo, chicle o galleta tenía su momento, su magia y su historia.
Hablar de ellos es volver a esos recreos infinitos, a las meriendas frente al televisor y a las excursiones con los amigos. Es recordar una parte dulce —nunca mejor dicho— de nuestra infancia.
¿Y tú? ¿Cuál de todos estos dulces recuerdas con más nostalgia?













