Una joven se viraliza por denunciar que le cobraron doble asiento en un autobús en Argentina

La indignante experiencia ha encendido las redes sociales y ha abierto un debate sobre discriminación y gordofobia en el transporte público.

doble asiento

El caso que ha dado la vuelta a internet

En los últimos días, una joven argentina se volvió viral tras compartir en redes sociales que tanto ella como su amiga fueron obligadas a pagar doble asiento en el autobús en el que viajaban. Según explicó en un vídeo publicado en su cuenta de TikTok, al momento de comprar los pasajes, la empresa de transporte les exigió abonar dos asientos por persona debido a su complexión física.

La publicación rápidamente generó una oleada de comentarios, tanto de apoyo como de crítica, y ha sido compartida miles de veces, convirtiéndose en uno de los temas más comentados de la semana en Argentina.

¿Discriminación o política empresarial?

La denuncia ha reabierto un intenso debate sobre la gordofobia, los límites de las normas de las empresas de transporte y los derechos de las personas con cuerpos no normativos. Muchos usuarios consideran que la medida es injusta y discriminatoria, y han señalado que el transporte público debería adaptarse a la diversidad corporal en lugar de penalizarla.

Por otro lado, algunos argumentan que, desde el punto de vista logístico, las empresas deben garantizar el confort de todos los pasajeros y que si un asiento no es suficiente, es razonable cobrar otro. Sin embargo, esta posición también ha sido criticada por promover la exclusión.

Un problema estructural que va más allá

Este no es un caso aislado. A lo largo de los años, han surgido múltiples denuncias similares en distintos países. Desde aerolíneas que obligan a comprar un segundo asiento hasta butacas que no contemplan medidas inclusivas, el transporte continúa siendo un espacio hostil para muchas personas con sobrepeso.

La viralización de este caso pone en evidencia la necesidad urgente de repensar las políticas del transporte y adaptarlas a una sociedad más inclusiva, donde todas las personas, sin importar su tamaño o forma, puedan moverse con dignidad.

La importancia de visibilizar

Lo más importante de este episodio es que ha servido para visibilizar una problemática real que muchas veces se esconde o se minimiza. Gracias a la valentía de esta joven, hoy el tema está sobre la mesa. Y si bien las redes pueden ser un lugar cruel, también son una poderosa herramienta de denuncia y cambio social.

¿Es justo pagar más por tener un cuerpo distinto? ¿Deberían las empresas adaptar sus servicios? ¿Qué papel juegan las políticas públicas? Estas son preguntas que, sin duda, debemos seguir haciéndonos.